Expansión. Dela punta de las uñas de mis dedos de los pies siento fluir, fluir, fluir... hacia los dedos de mis manos, liberadores. Hacia mi cabeza, estallante en luz, proyectiva.
Y libre, libre, libre corro dentro de mi cuerpo inmenso, sin cárceles.
No necesito valles y Heidi y abuelo, tengo luz y los tengo en mi cabeza.
No necesito a Kalessin para sobrevolar Terramar en su lomo, tengo imaginación y convicción.
La luz se expande en nosotros compañeros.
Somos dueños. Somos historia.
Focos de luz, el cambio que se viene.
Imparables.
Iluminemos todo todo todo alrededor, no nos quedemos con nada, sumámonos en la oscuridad maravillosa del haber agotado la luz en generar más fuentes infinitamente poderosas.

Giu, trece de enero de dos mil doce.